CUIDADOS SOBRE LA VOZ

¿Cómo tener un buen cuidado de nuestra voz dentro de la “nueva normalidad”?

Se habrá preguntado alguna vez ¿Es necesario preocuparme por el cuidado mi voz, aunque no sea un cantante, profesor o locutor de radio?

A veces estamos tan acostumbrados a realizar acciones en modo automático, como respirar, hablar, comer, caminar, etc. Cuando perdemos el control de aquellas cosas, o se nos dificulta hacerlo, deseamos haberlas valorado más o devolver el tiempo para evitar tener complicaciones en ellas. Ej: Siempre que nos resfriamos y se nos tapan las vías aéreas superiores, o sea, la nariz, deseamos tanto poder respirar como lo hacíamos antes, o si se nos produce un esguince en el pie, deseamos con ganas el poder salir corriendo, o caminar sin problemas, pero nos vemos imposibilitados a hacerlo. A veces puede ser por un corto o por un largo tiempo el retomar esas actividades con normalidad. Pero es cierto que podríamos evitar ciertas conductas que a corto o largo plazo pueden causar algún tipo de daño en nuestro organismo.

Lo que pasa con nuestra voz, independiente si somos o no cantantes, profesores, vendedores, y cuanta profesión exista, sin tener relación directa con lo vocal, es que, es nuestra herramienta principal para poder comunicarnos con las demás personas, es algo característico y único de cada individuo, nos ayuda a expresar emociones, ideas y facilita la interacción con otros. Es por eso que ahora en nuestra actualidad, nos preparamos para una “nueva normalidad” donde tenemos que acostumbrarnos a usar mascarillas o tapabocas constantemente, a lavarnos recurrentemente las manos, y usar desinfectantes.

¿Y qué tiene de malo usar mascarilla? La respuesta correcta sería, no tiene nada de malo o dañino, ya que evita en cierta manera que nos contagiemos con las partículas que cada persona expulsa de su boca a simple vista. Pero si no tenemos cuidado de proteger nuestra voz, podríamos sufrir de disfonía (que es la pérdida parcial de la voz), tener fatiga vocal, dolor al hablar, esfuerzo y/o agotamiento al hablar. Es por esto que al utilizar con mayor frecuencia la mascarilla, hemos tenido que alzar mucho más nuestra voz, para que las otras personas con las que nos comunicamos nos puedan entender y escuchar claramente.

Y ¿de qué manera sucede esto? Nosotros técnicamente le llamamos “conductas fonotraumáticas” son aquellas acciones donde se abusa y utiliza inadecuadamente nuestra voz, como, por ejemplo: Gritar, elevar el volumen de nuestra voz al estar en ambientes muy ruidosos, carraspear, toser de manera brusca, consumir alimentos muy condimentados, ya que tienden a irritar la mucosa que recubre nuestras cuerdas vocales, provoca que éstas se inflamen, y con el paso del tiempo causará que vayamos perdiendo el sonido y volumen natural de nuestra voz. El no hidratarnos de manera constante también puede provocar lesiones a largo plazo, y con hidratarse me refiero a tomar agua pura (ya sea envasada, o del grifo), no líquidos en general como bebidas azucaradas, café, mates, leche, sobre todo si sufre de acidez o reflujo (este ardor constante en el pecho o el estómago), etc.

No digo que con esto Ud. No vaya nunca más a consumir estos alimentos, y que tiene que eliminarlos definitivamente de su dieta diaria, es más que nada un tema de prevención disminuyendo su consumo. Como dicen por ahí, todo en exceso es malo. Por lo que hay que buscar un equilibrio. Ejemplo: Si me tomo un vaso de bebida, para contrarrestar puedo consumir dos vasos de agua. A continuación, dejaré unas breves recomendaciones para poder tener una voz sana y evitar así posibles complicaciones.

  • Si está en un ambiente ruidoso y abierto, utilizando mascarilla o tapaboca, lo ideal es que pueda modular bien y hablar un poco más lento, así le podrán entender mejor mientras se comunica, pero sin esforzarse al punto de estar alzando excesivamente la voz.
  • Evitar en lo posible los cambios bruscos de temperatura, suelen traer como consecuencias los resfríos o infecciones respiratorias.
  • No carraspear o toser fuerte.
  • Evitar hablar en exceso por mucho tiempo si siente que se cansa fácilmente.
  • Evitar comidas picantes o muy condimentadas (ají, merquén, pimienta, mostaza, etc.) Sobre todo, si sufre de acidez o reflujo.
  • Evitar consumir alimentos o muy calientes o muy fríos porque irritan nuestra voz.
  • Evitar consumir bebidas azucaradas o con cafeína, éstas tienen una acción diurética, finalmente nos deshidratarán.
  • Respetar las horas de sueño y descanso.
  • Hidratarse bien con agua. Aprox. 2 litros (Tomar 8-10 vasos diarios). Esto ayudará a que las cuerdas vocales vibren con mayor facilidad.
  • Si presenta resfriado y siente que su voz a cambiado (siente dolor o irritación al hablar, le pica, su volumen ha disminuido, etc) y no mejora en más de 1 semana, consulte a un médico, idealmente a un otorrinolaringólogo.

 

Esperando que este artículo haya sido de bendición para ti. Deseamos que puedas compartir con otros esta información y puedas leer otras reseñas en nuestro sitio web cuadrangulares.cl. Un gran abrazo a cada uno. La paz de Dios con ustedes. 

Fonoaudióloga Tamara Agusto Vargas
Iglesia AR Ministries, Santiago, Chile.
Estudiante Instituto Bíblico Cuadrangular